lunes, 21 de febrero de 2011

Cansada...


Estoy cansada, mucho.
Podría enumerar una gran lista de por qué estoy cansada,
por ejemplo, cansada de estudiar,
de vivir con mis padres,
de no poder hacer lo que quiero,
de que las cosas no me salgan como quiero,
de mis relaciones,
de todo un poco en general.

Pero hay algo de lo que estoy cansada en especial,
estoy cansada de esperar,
esperar algo de ti,
esperar a que me llames,
esperarte cuando llegas tarde
o me dejas plantada (como siempre),
de que me comprendas,
esperar que me des una sorpresa,
que aparezcas y me recojas,
que me lleves al cine, o a cenar,
que me lleves a algún lado...

No sé cómo explicar este sentimiento,
el cómo se siente el estar siempre esperando algo
que sabes que no va a llegar,
y aún así, lo sigues esperando...

Es como sentarte en la calle, en pleno Agosto,
y esperar a que se ponga a nevar.

¿A qué lleva todo esto?
A decepción.

Eso es lo peor,
llegar hasta el punto en que
ya no esperas nada de la otra persona,
porque sabes que no va a llegar nunca.
Eso, eso sí que es decepcionante...

Y ahora me pides que espere 6 meses,
meses en los que estás en Senegal,
meses de vacaciones que a saber lo que harás,
meses en los que no sabré nada de tí,
y la pregunta es....
¿si ni siquiera es que funcione muy bien la relación
estando en la misma ciudad, cómo va a funcionar,
a miles de kilómetros?
¿si ni siquiera eres capaz de llamarme ahora,
cómo vas a llamarme desde otro continente?

¿Qué es lo que queda?
Esperar...
justo de lo que ya estoy cansada.
No sé si seré capaz...


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