Me rindo,
tengo que dejar de esperar aquello que no existe,
tengo que crecer
y darme cuenta de que las historias de los libros,
son eso, historias,
no pertenecen a la realidad...
Simplemente no puedo esperar que
todo aquello que me ofrece un libro
me lo pueda ofrecer la vida,
a pesar de que un libro sólo consta de unas cuantas páginas
y la vida sea tan inmensa como lo es el universo.
Sólo que hay una importante diferencia,
que la vida es la realidad y los libros son imaginación,
la infinita e insaciable imaginación.
Sí, esos libros que nos dan esperanzas,
que nos engañan creyendo que encontraremos a nuestro príncipe azul,
que tendremos un bonito final feliz,
que conseguiremos aquello que nos propongamos...
No... no puedo dejar que mi vida se guíe por la fantasía,
simplemente habrá que afrontar la realidad,
esa que nos golpea día a día en la cara,
que nos hace ver que el amor sólo es bonito en los cuentos...
Y cuando esté tan golpeada por la realidad,
acudir a mis libros, mi fantasía,
el único sitio que no me decepcionará nunca,
el que surge un amor tras otro,
incluso te sientes querida y nunca sola...
Pero he de empezar a saber diferenciar,
y a no esperar que mi fantasía,
se pueda convertir en mi realidad...
