sábado, 14 de mayo de 2011

Abrir los ojos


Dicen que el amor es ciego,
pero, ¿a qué se refieren?
Que cuando nos enamoramos no vemos
los defectos de la otra persona, o
hacemos las cosas sin pensar.
Sí, puede que sea eso,
pero yo le voy a dar otro significado.

Es ciego porque muchas veces
lo tenemos delante y ni lo vemos.
Estamos tan ciegos que no sabemos verlo.
Y yo, ¿a qué me refiero?

Pues a que tengo un hombre maravilloso,
que hace cosas que nunca han hecho por mi,
que me demuestra que me quiere,
que haría cualquier cosa por mí...
y yo tenía los ojos cerrados y no lo veía.
Y ese, es el hombre que mi cabeza me decía,
pero que mi corazón no me dejaba ver.

Mi estúpido cinismo tampoco me dejaba ver,
este hombre hacía tantas cosas bonitas,
maravillosas y románticas por mí,
que yo no me las tomaba en serio,
no las veía, no me creía que fuera verdad
que alguien estuviera haciendo todo eso y sólo por mí.

He abierto los ojos, he visto que ya es hora,
hora de pasar a un hombre que me trate bien,
que me trate como a una princesa,
que me quiera y me lo demuestre.
Ya basta de estar sufriendo por amor,
basta de hombres con falsas promesas
que me dejan esperando.

Ahora te has ido a Francia, ahora que podía tenerte,
pero no importa, te esperaré.

Ya te echo de menos, necesito que vuelvas,
ojala todo salga bien.
¿Qué pasará en estos 2 meses que no estás?

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